El médico le realizará, o pedirá que le realicen, pruebas para medir el flujo sanguíneo. El índice tobillo-brazo (ITB) es una prueba frecuente para detectar la AP, ya que puede ayudar en el diagnóstico de la enfermedad en pacientes que pueden presentar síntomas o no. Se realiza comparando la presión arterial en los tobillos con la presión arterial en los brazos antes y después de realizar ejercicio. Esta prueba es importante para el diagnóstico y no es invasiva. Esto significa que no será necesario sedarle ni hospitalizarle para realizar esta prueba. Si es usted diabético, es posible que el ITB no sea una prueba adecuada.
La AP también se puede diagnosticar con otras pruebas que miden el flujo sanguíneo y la presión, como una prueba de presión segmentaria para las piernas, el índice dedo-brazo (IDB) y la ecografía Doppler para el flujo sanguíneo en las arterias.